domingo, 16 de marzo de 2008

Regreso

A veces el silencio es necesario. Hay que dejar reposar las ideas para evitar catástrofes y erratas, pues las palabras que nacen ya no vuelven a ocupar su lugar. Dicho esto comenzaré a contarles sobre mi viaje a Cuba, ese "viaje a la semilla", esa dulce tortura a la que me someto a cada rato, como remedio contra el tiempo y sus trampas autocomplacientes.
Cuba me dejó inmóvil, pusilánime, me enfrentó con mi imagen y al mirarme en ese espejo me di cuenta de que estaba desvariando, creyéndome los cuentos que yo misma me inventaba: cuentos en blanco y negro. Descubrí que no estaba siendo sincera con mi esencia, que me había creado un personaje, una pose de triunfadora, para no aceptar la realidad: en la lucha contra mí misma sólo yo había perdido. Mientras tanto el país y su gente (mi gente, mi historia) seguían estando ahí, mejor o peor, pero reales. Únicamente yo me había convertido en un fantasma, me había divorciado de mi esencia creando un país imaginario, de bolsillo, ignorando deliberadamente -como solemos hacer los cubanos cuando emigramos- la Cuba verdadera, compleja y llena de matices que hasta este viaje no logré entrever.
Era preciso (y fue posible) retornar a mis orígenes, al calor del hogar, a la paz que solamente se siente cuando estás junto a los tuyos, y para ello era necesario dejar de juzgar, desterrar de mi espíritu el rencor y la tristeza que me provocaba el estar lejos de mi centro. Si yo me había ido por mi propia voluntad, si había podido volver, porque afortunadamente, y a diferencia de otros que no pueden regresar por una ley injusta, yo he podido volver cada año. Si -dentro de los límites razonables- soy una persona feliz, que ha podido conocer otra cultura, otro modo de vida, y aún así continúo teniendo a mi familia, ¿cuál era el malestar? Me preguntaba. ¿Por qué, siguiendo un patrón estereotipado, me amargaba la vida juzgando a mi gente con tanta dureza, como si ellos fueran los culpables del mal funcionamiento del país? ¿Acaso no lo era yo también, por haberme ido?
Muchas fueron las dudas que me asaltaron durante el viaje: ¿tenía que haberme quedado? ¿Emigrar me había hecho más feliz? ¿Quién habría sido yo, de no haberme ido? ¿Sería una ladrona, una frustrada, o quizás habría logrado preservar la alegría que hoy echaba en falta? Al cabo de unas semanas de verdadera observación no estaba tan segura de que emigrar hubiera sido lo mejor. Al compararme con mis coterráneos (una manía que no pude dejar de practicar en todo el viaje), me sentía tan desgraciada... yo había perdido color, sabor, me había desteñido en virtud de una eventual adaptación y ahora me sentía en desventaja, un engendro sin frescura ni alegría, un personaje indefinido, ni cubana ni española, ni chicha ni limoná, una mezcla rara que desconcertaba a mis interlocutores. Y lo peor, me sentía una egoísta por haberme largado en vez de quedarme a arrimar el hombro.
Descubrí que, más allá de algunos cambios superficiales, de ciertos refinamientos y cierta responsabilidad propia de la madurez, no era mucho mejor persona que la que salió de Cuba hace ya siete años. Me noté menos generosa, ingenua, idealista, que cuando estaba allá, y en mis comparaciones hasta me encontraba poco femenina al lado de las cubanas, tan presumidas y coquetas, tan alegres a pesar de tantas limitaciones, que despertaron mi admiración y también cierta envidia.
Pero claro, todo esto no eran más que paranoias mías, el enemigo estaba en mi cerebro. Yo me había ido, como muchos, haciendo uso de mi soberano derecho a la libertad de movimiento, como ciudadana del mundo que soy, que somos todos. No obstante por momentos cierta angustia me impedía disfrutar del regreso. También, todo sea dicho, hubo momentos en que sentí una clara hostilidad; comportamientos desconsiderados, poco elegantes, ante los que tuve que sacar un extra de paciencia y buena voluntad, o ante los que simplemente estallé. Como al llegar al aeropuerto, ese matadero con su correspondiente pesa donde se le quitan a uno hasta las ganas de ver a la familia. La cueva de Alí Babá y los cuarenta ladrones.
En más de una ocasión me acordé del poema de Félix Grande que dice que "donde fuiste feliz/no debieras volver jamás", que alguna vez puse en este blog, y algunos días hasta lloré de impotencia, pero en honor a la verdad tengo que decir que los momentos malos fueron mínimos en comparación con los buenos, pues este fue, con diferencia, el mejor de los viajes que he hecho a Cuba, una vuelta a casa, una reconciliación de verdad. En esos días pude dormir a pierna suelta como antes, sentir el calor y la seguridad del hogar, sentir que pisaba tierra firme. Pero además de todo eso, que ya es mucho, pude intercambiar con gente, escuchar sus opiniones, que en el fondo no son muy diferentes de las mías, y así descubrí que lejos de lo que pensamos desde fuera, la gente en Cuba, no toda, bien es cierto, pero más que hace diez años, se está poniendo las pilas y está evolucionando en materia de competitividad. En el país de vagos ilustrados que dejé hace siete años están pasando cosas, poco a poco, desde dentro. Ya nadie se cree el cuento del socialismo, ya nadie vive con lo que le dan por la libreta. Todo el mundo está para el negocio, a veces turbio y sin ética, pero lo más importante es que la gente está despertando del sueño dorado, esa utopía improductiva que ha hecho tanto daño.
Cuba tiene futuro, yo lo veo. Un futuro brillante, aunque para ello habrán de pasar años, quizás décadas y habrá que halar parejo. Por lo pronto yo me conformo con esta alegría que me ha dejado el viaje, un viaje en que he roto mis prejuicios, he tendido puentes y me mirado a la gente (mi gente) cara a cara.

38 comentarios:

Anónimo dijo...

chapeau y envidia, de la buena..ambos.Saludos desde Texas
Julio

Ivis dijo...

Gracias, Julio querido, un abrazo.

Jobove - Reus dijo...

quedadte con tus gentes que son el bien mas preciado, bienvenida de nuevo a casa

petonets

Ivis dijo...

Gracias, amigo de Reus. Un saludo y gracias por esa bienvenida.

Manuel Sosa dijo...

Quiero publicar este post en mi blog. ¿Me dejas?

Ivis dijo...

¡Por supuesto! Será un honor.
Saludos.

Manuel Sosa dijo...

Hecho! Gracias!

Jose Varela dijo...

Prima

Bienvenida al mundo de afuera. El que nos ayuda a "ver" lo que dejamos detras objetivamente y con la humildad requerida para ser mejores seres humanos, viajeros eternos.

Yo tambien tuve una experiencia similar a la tuya, despues de 13 anos sin regresar a la isla amada. Vi que los cubanos estan puestos para el negocio y para el desarrollo de sus individualidades.

Vi ademas una voluntad discreta y solapada de parte del gobierno por cambiar la dinamica de la vida diaria. Me sorprendio ver la cantidad de negocios y restaurantes nuevos. La bella restauracion de La Habana Vieja. En fin un cambio que debera llegar poco a poco y con muchos anos por delante.

Sinembargo, tambien me senti emocionado al regresar a Washington DC, pues aqui he desarrollado la segunda mitad de mi vida, y me siento identificado con lo positivo y bueno de esta cultura.

Te enviare un dvd que hice con vistas de mi viaje a la isla.

Nuevamente bienvenida

Tu primo

Manolito

Ivis dijo...

Manuel, ya lo ví. Te estoy muy agradecida.
Primo, ¡gracias! Sé cómo fue para tí regresar. Yo creo que regresar nos reafirma en nuestra proyección o nos ayuda a corregir el tiro. Pero siempre nos ayuda.
Besotes, tenemos que intercambiar cds.

Mar dijo...

Enhorabuena Ivis, es muy buena noticia eso que dices de que la gente se está poniendo las pilas, se da cuenta de que así no se puede vivir.
Te veo mucho más madura después de este último viaje, me ha parecido expléndido tu artículo tras tu regreso de Cuba.
Un besazo cubanita

Yvette dijo...

Ivis, pase por aca para saludarte rapido, veo que has escrito, que bueno, te leere luego que ando en un cafe en la Estacion Central de Estocolmo y no tengo mucho tiempo.
Asi que regreso cuando ande por mi pueblo, un abrazo!

GeNeRaCiOn AsErE dijo...

Cuantas cosas pude recordar con este escrito... hoy colgamos un link en nuestro sitio para que lo lean más personas. ¡Bienvenida!

G.A.

Ivis dijo...

¡Hola Amiga! Ando perdida del ciberespacio, espero me perdones.
Muchas gracias por tu comentario, realmente ha sido como un mazazo este viaje, pero para bien.
Besitos.

Ivis dijo...

Hola Yve y Tony. Gracias por pasarse. Yve ¿cómo están "las nieves de Estocolmo"? Qué rico eso de viajar.
Asere, gracias por el link, te caigo por allá en un rato.

Anónimo dijo...

Al leer las reflexiones de tu último viaje a Cuba me he acordado de un dibujo de Francisco de Goya en el que aparece un anciano caminando ayudado por dos bastones que sostiene en sus manos, en el ángulo superior derecho del dibujo Goya escribió "Aún aprendo".

Gracias Ivis por compartir con nosotros parte de lo que has aprendido en tu viaje.

GeNeRaCiOn AsErE dijo...

Gracias por esta historia. Siempre me ha preocupado eso del regreso por los mismos factores de la distancia que me han cambiado, quizás irreparablemente. Han pasado 16 años y creo que me has dado en el clavo de la duda. Ya veremos un día cuando me toque a mí.

saludos
albert

Aguaya dijo...

Qué bueno, Ivis, poder leerte otra vez!

Y qué bien me ha hecho leerte tan optimista, alegre, esperanzada, como mismo quisiera sentirme yo después de un regreso. Mi familia me mantiene al tanto pero no es lo mismo vivirlo en carne propia...

Tú dices que has ido cada an~o y aun así esta vez has encontrado nuestra tierra "diferente". Yo me atrevería a decir que tu estado de ánimo anterior al viaje guardaba cierta relación con tu blog?? donde has escrito y sido partícipe de forma activa de opiniones, conjeturas, posiciones para con nuestro país... Te ayudó el blog a ver mejor (o peor) la realidad cubana? Qué tú crees? Tu blog cumple un an~o en Mayo... el país ha cambiado tanto de allá para acá? o son tus ojos que lo vieron desde otro ángulo? Cuéntanos!!!

Un beso,
AB

A Cuban In London dijo...

Hola, Ivis, ya te saludé el otro día cuando llegaste de nuevo a tu casa bloguera. Espero que no haya mucho reguero.

Por tu perfil y tus experiencia me parece que somos de la misma etapa e incluso hayamos andado con la misma farándula en algún momento. Yo tengo 36 noviembres ya.

Mi generación fue lo que un amigo nica llamó "la generación acomodada". Acomodada porque en los 80 era fácil llegarse hasta el mercadito de Línea y G, comprar un trozo de mortadella, comprar pan de flauta e irse de campismo un viernes para regresar el domingo con las guagüitas que salían de Puerto Escondido. Esa falsa impresión de seguridad económica no nos habilitó bien para el encontronazo de los 90. El cubano no se rebeló, sino que se adaptó. Y a veces no sé si hubiera sido mejor hacer catarsis, como aquel que dice, y seguir el ejemplo de los rumanos o hacer lo que hicimos nosotros: adaptarnos.

Yo fui a Cuba el año pasado y como tú noté el resquebrajamiento de la moral de la que nos enorgullecíamos años atrás. Y lo peor es que no vamos a recobrarla. Comparto tu opinión de que el futuro de nuestra isla será brillante, pero a veces me entra un desasosiego que estoy seguro que tiene que ver más con el temor de que este futuro brillante no tendrá lugar jamás y de que la única razón por la que yo todavía me aferro a una idea esperanzadora es porque soy cubano.

Muchas gracias por tus reflexiones, eres muy franca y honesta. He tenido suerte en los últimos tres o cuatro meses de conocer a otros blogueros tan cubanos como yo, que dejan a un lado su parcialidad (con Fidel o contra Fidel) y encaran las distintas problemáticas que afectan a nuestro país desde un punto de vista pragmático (y romántico a veces), realista y sincero.

Saludos desde Londres.

Los Miquis de Miami dijo...

excelente post, el futuro de cuba será brillante, pero en la misma medida en que viste a muchos cubanos que se pusieron las pilas y están tratando de seguir adelante, la mayoría lo tiene que hacer en la ilegalidad, en el robo, en el mercado negro. es un cambio de mentalidad muy fuerte porque a lo que único que te acostumbras es a eso. ojalá el daño no sea lo suficientemente fuerte como para que cuando llegue ese momento de cambios, nos sepamos adaptar sobre la base del trabajo, no del robo y el trapicheo.

Betty dijo...

qué reposado y bien logrado este post del Regreso, Ivis...entremezclas los tonos grises, que ya no tan blancos y negros de la realidad allí ahora, con tu toque (otra vez;-? de cuestionamiento a tí misma....muchacha que te tienes que leer a Punset, que está bien el camino andado y eres mejor ahora, más completa e ilustrada -e igual de femenina- que cuando dejaste la Habana...hay que tener un proyecto cuando en derredor no hay alternativa...Por lo demás, en línea totalmente con este comentario arriba de los Miquis de Miami- lo peor de recuperar es la integridad y laboriosidad de la gente, activo en alza para cualquier país.

Ivis dijo...

Haddock, tú siempre con tus acertados comentarios. Saludos, capitán.
Albert, 16 años son muchos años... Tienes que ir, no es tan malo, si te lo tomas con filosofía. Además, hay que sentarse en el malecón y respirar el salitre. Eso es remedio santo, que te lo digo yo.
Un saludo, hermano.
Aguaya, por supuesto, el blog ha sido una luz para esta búsqueda que tenía. No sabes cuánto me ha ayudado a encontrarme y a superar la nostalgia. A vivir una vida más real, y a conocer mucho más a Cuba, que es tan contradictoria. Ojalá tú puedas ir pronto, amiga. Verás cómo te sienta de bien, pero hasta entonces, disfruta de esta etapa y aprende de tu entorno. Cada lugar tiene su encanto.
Por supuesto que como he ido varias veces no me sorprende tanto, pero te juro que este año, gracias al blog quizás, tenía los ojos abiertos, realmente abiertos, y estaba predispuesta a grabar todo en mi memoria, (y en mi cámara).

Ivis dijo...

Cuban in London, tienes razón, somos los acomodados, por eso tenemos esa visión idílica de Cuba.
Yo creo que los problemas morales heredados del socialismo lastrarán durante unos años la economía cubana. Mas no son problemas exclusivos del socialismo, no olvides que somos latinos y que eso es lo que más inluye. No obstante el capitalismo tiene sus leyes y éstas no creen en cuentos de camino. Pero va a costar Dios y ayuda que el país camine. Ojalá que camine. Gracias por tu visita, eres siempre bienvenido.
Los miquis, ahí está el detalle: trabajo, no trapicheo. Siempre quedará quien quiera vivir del cuento, pero cuando la gente descubra el valor del trabajo bien hecho, serán menos. Lástima que no haya un veneno para los parásitos (es broma, no me tomen ahora por genocida). Gracias por pasarse.
Betty, amiga, me calaste. Tú tienes rayos X, siempre me cuestiono, son mis inseguridades, aunque a veces exagero un poco.
¿Cómo se llama el libro?
Besitos.

Betty dijo...

Aquí te dejo la ficha,
EL VIAJE A LA FELICIDAD: LAS NUEVAS CLAVES CIENTIFICAS
Autor
PUNSET, EDUARDO
Editor EDICIONES DESTINO, S.A.
Isbn 8423337774
Clasificación Biología. Estudios y ensayos Precio € 19,00

Como a veces me "matraqueo" con tus mismas dudas y con eso de ya no ser "ni de aquí ni tampoco de allá" -como escribe el Yoyo por ahi en una cadena de e-mails que ha dado muchas vueltas entre los cubanos "migrantes"- pues te lo sugiero porque es una lectura objetiva y excelente. Creo que siempre seremos un poco "de allá", aunque ese allá va cambiando y no es idílico ni el estereotipo que guardamos mezclado con gorrión, todo cambia parejo. un beso

Cybercíclope dijo...

Hola Ivis,

Desde mi propia experiencia, un latido muy similar. Aquí te lo dejo...

aretino

De Vuelta


Regreso de mi viaje, vivencia transcurrida
cargando las demandas de una Isla ilusoria
retorno de otro sueño sin corona y sin gloria
y con cada regreso se me queda la vida

Salto, ajusto el pie firme, atenazo la brida
caballero escindido y ahogado de memoria
fundiendo con nostalgias mi espada transitoria
de defender en vuelos, la utopía perdida

Urgido en el galope el alma se me yerta
siempre vuelvo y me escapo y me repito al viento
soy un puente flotando entre mis Islas muertas
Caribe indefinido entre el dolor y el cuento

Siempre que me abandono a tanta geografía
devengo el hombre-isla de mi propia entropía

Skapada Blog dijo...

Mientras leía este artículo me venía a la mente aquella canción que tantas veces canté en mis años de La Cujae "¿Quien dijo que todo está perdido? yo vengo a ofrecer mi corazón"
Si en aquella época me hubieran dicho que un día estaría fuera de Cuba no lo hubiera creido. En aquellos tiempos fui feliz como no lo he sido nunca más.
Volver a Cuba se aproxima a esa época, pero también nos trae la triste realidad de que eso que soñamos es pasado.
¿Quien dijo que todo está perdido? Lo que pasa es que mientras más tiempo pase más se hunde la isla y el esfuerzo para recuperarla va a ser mayor.
Ayer soñé (esto es real) que estaba en La Habana, que nunca me había ido y la alegría tan grande que sentí me despertó, entonces miré por la ventana y la nieve me volvió a congelar. Este mal no tiene cura.
Si me lo permites io también quisiera publicar este artículo en mi Blog.

Al Godar dijo...

Excelente Ivis.
Todo va a mejorar.
Cuba va a levantarse.
Va a tomar un cierto tiempo porque el daño es mucho, pero confio en que ira adelante y dentro de un tiempo nos parecera solo una pesadilla.
Yo tambien linkeo tu post en mi blog.
Saludos,
Al Godar

Lisetg dijo...

Sera muy interesante regresar. Este post me despierta muchas cosas, me despierta miedos y alegrias, un poco de esperanza tambien. Yo sali de Cuba hace poco, en el 2006 y no tengo exactamente la opinion que tu tienes. Lamento ser mas pesimista, pero no puedo evitarlo. Vi como se estaba desbaratando todo, y lo peor la moral, los valores de todo tipo. Cosas que no te das cuenta si no lo vives. La falta de educacion, la vulgaridad, tan enraizadas que tomaran decadas, varias, para que coga cierto nivel. Siempre te encontraras gente como tu, sobre todo si te rodeabas de ellos, los que quedan. pero, aunque me gustaria tener tu optimismo, no puedo. Fueron 33 annos viviendolo, viendolo, sufriendolo. Sufria sobre todo al darme cuenta que no queria de ninguna manera que mis futuros hijos crecieran en mi tierra. y eso, creo yo, es un pensamiento muy triste.
Ojala tengas razon, Ivis. y gracias por estas experiencias tan bien escritas.

Anónimo dijo...

pasé a ver el post tan celebrado en lo de los Aseres.

gracias por escribirlo

el osva

Aguaya dijo...

Lisetg, entiendo tu pesimismo: lo comparto en su totalidad... quizá diga otra cosa si regresara, como puede hacerlo Ivis al menos, o pensar AlGodar, pero tiendo a tu reflexión en mi interior, por más vueltas que le dé al asunto...

Yo quiero ser optimista! tengo que intentar serlo para con mi país como mismo lo he logrado en otros ámbitos de la vida, pero es que siempre hay un pero, que ya se estira por casi 50 an~os y no parece encogerse de veras sino que adquiere una nueva forma...

Será muy errado pensar así? o es más realismo de la cuenta? u ofuscación? Lo del blog es muy buena terapia, tienes razón querida Ivis. Beberé de tu lente a ver si puedo apreciar lo mismo que tú desde otro ángulo... Me alegra que ya lo hayas logrado tú.

Saludos desde Berlín!!

(Qué blog más lindo tienes, Liset! ya lo pongo en mis links para visitarlo de nuevo...)

Ivis dijo...

Aretino,

Ese poema es una maravilla. Eres un gran poeta, además de un gran artista. Por eso te admiro.
Yoyo, encantadísima. Es un honor para mí. Lo de la nieve tiene que ser duro, aquí por lo menos no cae nieve y se está bastante bien, incluso en invierno. Yo a veces sueño también con Cuba, pero últimamente no tanto.
Al, así mismo, hay que ser optimistas, que hay mucha gente buena y mucha buena voluntad, y la cosa tiene que ir a mejor. Gracias a tí también, eres siempre bienvenido.
Lisetg, te entiendo, y no se puede tapar el sol con un dedo. Pero cuando estás fuera y ves que otros países echan pa'lante con gente igual de vulgar gracias a la economía, que es el principal motor en esta historia, y que luego esa riqueza que se genera se revierte en la educación de la gente, entonces entiendes que es posible. Cuando hablo de que Cuba tiene futuro, hablo de un futuro a largo plazo, lloverá mucho antes de alcanzarlo.
Creo que lo más importante, el capital humano, está ahí. Amiga, no nos ceguemos: en Cuba cualquier persona tiene instrucción, aunque esta no siempre vaya acompañada de educación, y eso es un activo (utilizando la frase bursátil de Betty) importante para cualquier país. De algo servirá, si se aprovecha, la "masificación de la cultura", los canales educativos y todas esas mesas redondas que hoy nadie se quiere disparar. Lo único que puede entorpecer ese proceso, a mi entender son la enraizada burocracia y nuestra proverbial holgazanería y falta de seriedad ante la vida.
El Osva, un besote, amigo.
Cuídate mucho.
Aguaya, confía en lo que te digo, yo que lo veo sin apasionamiento casi, porque he tomado distancia.
Cuba será un país bueno para vivir en unos diez años, no queda tanto.
Tenemos un clima envidiable, gente alegre, instruida, buena música, lo único que hace falta es que la gente pueda vivir y echar para adelante.
Saludos, mi gente.

JOSÉ TADEO TÁPANES ZERQUERA dijo...

Hola Ivis:
Me ha gustado mucho tu escrito. Es hermoso, tierno, y nos pone a los cubanos que nos hemos ido ante el recuerdo de cada regreso a la isla, todos con sus emociones desatadas y contenidas y con ese comparar lo que dejamos con lo que encontramos.
Creo que todos nos hemos preguntado qué habría sido de nosotros de habernos quedado.
La vida siempre estará llena de cuestionamientos, pero lo importante es que tú tienes esa capacidad para mirar sin temores tu realidad, analizarla y tratar de explicártela a ti misma, aún corriendo el riesgo de llegar a conclusiones desconcertantes.
Gracias por ser tan linda y tan especial. Me reí mucho con lo de Alí Babá y los 40 ladrones, 41 diría yo. Besitos:
Tadeo

El isleño dijo...

Hola Ivis... las prisas que llevo en estos último días me jugó una mala pasada y, como entraba y veía un post con un video de Lina de feria leyendo un poema, asumí _erróneamente_ que tu blog permanecía en espera de la visita de tus musas... hoy leí una nota en el blog nuestro de Tadeo, hablando con Betty, y entonces caí de mi error... discúlpame pues por este atraso, imperdonable en un tema que nos mueve a todos tus fieles lectores.

"La Cuba actual"... ¿qué podemos añadir a tu excelente reflexión? (se puede utilizar aún esta palabra sin que a uno lo tachen de "aquello", ¿verdad?...).

Yo realmente solo puedo apoyar lo que dices acerca de la evolución del país, y del capital humano que tenemos por la instrucción que gozamos de forma masiva pero _y aunque estamos en cierta espera de ciertas "medidas" que se deben tomar para eliminar algunas "prohibiciones" absurdas_ yo creo que lo esencial es que nuestro recien estrenado gobierno ha asumido públicamente que la única forma de salvar esta revolución social es reactivando la economía... en lo que nadie está seguro es hasta donde serán capaces de llegar. A pesar de toda la expectativa que hay en todo el mundo por esas "medidas" yo insisto en que no debemos ser demasiado optimistas al respecto, pues no creo se asuman aquellas medidas que realmente podrían sentar las bases de una nueva "revolución": abrir nuevamente el país a la inversión extranjera (que tan erosionada ha sido en lo últimos años), incluyendo en este inciso a potenciales inversionistas cubanos residentes en el exterior (¿por qué no?), abrir a la iniciativa privada el sector de los servicios y hasta permitir la creación y operación de pymes (pequeñas y medianas empresas, casi siempre especializadas) que son las que crean una red de instituciones independientes sólidas, que es muy raro que se conviertan en millonarias, pero que indudablemente, independizaría a una parte importante de la pobalación cubana de la dependencia del salario u los subsidios estatales... y tengo mucho más en el tintero, pero corro el riesgo de aburrir a esta tropa de amigos...

Igual, me alegra mucho que hayas introducido el tema y que estés nuevamente con nosotros.

Por cierto, en este viaje, también, ratificaste tu cubanía e hicistes nuevos _y estoy seguro que buenos_ amigos. Un abrazo.

Ernesto G. dijo...

Saludos, Ivis, de alguien cubano como tu y quiere ser poeta. Tengo poesia en mi blog. Voy a poner un link de tu blog en el mio.

Saludos desde Miami.

Ernesto

William Navarrete dijo...

Hola Ivis,
muy sincero tu post.
me alegro que hayas podido regresar y sentir esas emociones (a la vez que reconocer que esa suerte no le es dada a todo el mundo).
La gente que se ha quedado en Cuba ha estado atrapada en un sistema que es el mismo en que estuvimos atrapados los que nos fuimos.
Supongo tambien que quien tenga a su familia en el pais no le quede mas remedio que mantener el puente. Creo que los cubanos que tienen necesidad de regresar o que regresan por simple gusto pueden ser muy utiles para oxigenarles un poco la vida a los que viven en la isla.
Y en cuanto al hecho de que dices que pudiste constatar que has perdido la frescura o generosidad, permiteme decirte que creo que lo que te sucedio es que creciste y te diste cuenta viviendo fuera de Cuba que la vida no es vivir debajo de una mata de mango esperando el milagro del mango maduro que por obra y gracia del pajaro que remueve la rama te caera en la boca.
saludos,
William

Ziryab dijo...

PORVENIR

Te llaman porvenir
porque no vienes nunca.
Te llaman: porvenir,
y esperan que tú llegues
como un animal manso
a comer en su mano.
Pero tú permaneces
más allá de las horas,
agazapado no se sabe dónde.

!Mañana! Y mañana será otro día tranquilo
un día como hoy, jueves o martes,
cualquier cosa y no eso
que esperamos aún, todavía, siempre

A. González

Me ha gustado leerte. la vida pegada en la piel.
Me pregunto a veces, cada vez más, que es la realidad y si está existe. Todo es tan relativo. Me dicen,como una sentencia-las sentencias, sobre todo esta, deben estar barnizadas, impregnadas de ternura- y debe ser cierto, con seguridad, que el que se adapta sobrevive.-Cuba es un milagro-("que tu risa no me falte, Habana mía".

Lisetg dijo...

Gracias Aguaya Berlin por lo que dices de mi blog.
no habia vuelto a revisar esto y ahora es que lo hago, un poco tarde.
Ivis, aun asi, te repito, quiero tener tu optimismo. en los ultimos annos en Cuba fueron mas la gente vulgar y malacostumbrada que vi, que la gente que podria echar palante el pais, pero repito: OJALA ESTE EQUIVOCADA!!!
con todas las fuerzas de mi corazon.
saludos a todos, y gracias Ivis por el disfrute de este post.

cleo dijo...

Hola Ivis,
yo también acabo de regresar del "charco" como hago desde hace 14 anos.Al igual que tu me impactan mis faltas que veo nitidamente reflejadas en las otras mujeres de mi isla(también yo me vi poco femenina y con gran falta de visita al manicurie etc etc).Llevé a mi hija de 10 anos (nacida en Europa) a vivir nuestra cultura.En el anfiteatro de la Habana Vieja ponian un bellisimo musical "El jorobado de nuestra senora de paris" que aqui en el occidente costaria un paston y yo pagué solo 5 pesos cubanos.Te juro de quitarte el sueno.No me perdi un sabado del libro.Vi el concierto de Raul Torres en el mella y en el mella llevé a mi hiaj aver una obra super del coreografo Narciso Medina.En fin, el mar.Regresar ha sido duro.Creo que ni Europa es el paraiso, ni la isla el iniferno.Un besote desde Roma,
cleo

cleo dijo...

Hola Ivis,
yo también acabo de regresar del "charco" como hago desde hace 14 anos.Al igual que tu me impactan mis faltas que veo nitidamente reflejadas en las otras mujeres de mi isla(también yo me vi poco femenina y con gran falta de visita al manicurie etc etc).Llevé a mi hija de 10 anos (nacida en Europa) a vivir nuestra cultura.En el anfiteatro de la Habana Vieja ponian un bellisimo musical "El jorobado de nuestra senora de paris" que aqui en el occidente costaria un paston y yo pagué solo 5 pesos cubanos.Te juro de quitarte el sueno.No me perdi un sabado del libro.Vi el concierto de Raul Torres en el mella y en el mella llevé a mi hiaj aver una obra super del coreografo Narciso Medina.En fin, el mar.Regresar ha sido duro.Creo que ni Europa es el paraiso, ni la isla el iniferno.Un besote desde Roma,
cleo