lunes, 12 de julio de 2010

Caminos

Después de mucho andar, regresar al mismo punto brinda una especie de tranquilidad que reconforta, aunque no se hayan llenado los bolsillos más que de fantasías. El tiempo es lo que cuenta, desandarlo de alguna manera, un pie detrás del otro, respirando, observando, viviendo, dándole cuerda al reloj para que no se detenga.
Si tengo que ser sincera he de decir que lo de dar cuerda al reloj últimamente a veces se me olvida: son tantas y tan intensas las emociones que he vivido, que unas horas de ventaja se me hacen absolutamente indispensables para recrear la ilusión del tiempo detenido y conseguir a cualquier precio el silencio de los sentidos y también del dolor. Silencio: no tener que aprender nada nuevo ni observar un paisaje que nuestras pupilas no hayan registrado ya. Que todo lo nuevo es desconcertante. ¿Cómo asumirlo entonces si aún no acabamos de comprender lo cotidiano?
Vernos como animales; pensar que todos tenemos brazos, patas y pezuñas. Algunos más bonitos, otros definitivamente mal dotados en unos aspectos pero agraciados en otros, y siempre un equilibrio, siempre una cara para el recuerdo y unos brazos para el abrazo. Y si estos brazos y esta cara no estuvieran ahí, ¿seríamos los mismos? Siempre nos quedará la duda; siempre quedan las mismas preguntas en el aire para que las descifren los que vienen detrás que lamentablemente se dedicarán a formular sus propias preguntas y no escarmentarán por otra cabeza que la propia. Y así por los siglos de los siglos.
Hoy cedo al caos de mi mente sin intentar ordenarlo pues me he dado cuenta de que el caos impera y no hay nada que se pueda hacer para evitarlo. Todo orden es inútil y falso; sólo nosotros, con nuestra insuficiencia, necesitamos de esas jerarquías. Sólo nosotros, con nuestra ceguera, vamos pisando flores mientras nos agarramos de un hilo imaginario que estrangula nuestras vidas. Sólo nosotros, haciendo gala de una torpeza y un mal gusto exquisitos, vamos organizando las cosas por colores y colocándolas de menor a mayor.

9 comentarios:

Anónimo dijo...

IVIS
me alegro entonce de algo que escriviste. passo mucho tiempo de tu ultimo post.
sabe como anda las cosas en cuba, sabe los ultimo!!!
No te preocupe por el disordine mudial, estom aqui y aqui tenemos que lucar por nosotros.
un beso
NIKI

Salva dijo...

Hola Ivis,

la tua sensibiltá di descrivere é come gia ti dissi, straordinario.

Bene, ma non voglio soffermarmi in complimenti, ma arrivare al dunque.

La crisi, il chaos, o quello che definiamo tale, a volte serve. Chiaro, nessuno vuole sensazioni, situazioni, o esperienze negative. Questo di sicuro NO!
Ma a volte serve appunto per rifare ordine, per farci riflettere, per trovare, o meglio, per capire quali sono i nostri deficit, appunto per far si che la prossima volta li evitiamo, o che non arrivano proprio a colpirci.
Indipendentemente se si tratta di disordine, chaos, o altro a livello personale, generale o globale.
La storia ci insegna proprio questo, che come funziona il ciclo di un andamento di cose, di una storia o di uno sviluppo, cosi funziona anche poter trovare alla fine una soluzione o delle soluzioni per migliorare.

Non tutto il male viene per nuocere, dice un vecchio proverbio da noi. E questo é sempre (o quasi) vero :)

Bacio,
Salva :)

Ivis dijo...

Chicos, muchas gracias por sus comentarios, Niki, un placer tenerte por aquí de vuelta. Salva, concuerto contigo en todo lo que planteas, es un buen proverbio ese que mencionas.
Al parecer tengo suerte con Italia, jajaja. Un abrazo a los dos.

Anónimo dijo...

"el problema vital es el alma...será siempre sembrar amor"

Ivis dijo...

Sí, ya lo había notado... Lástima que el amor no sea tan simple como una planta. Saludos, quien quiera que seas.

A Cuban In London dijo...

Profundos pensamientos, querida Ivis. Hay que ver, eh? Si no pongo a Chambao en el blog, no te apareces mas. :-)

Gracias por los enlaces que me mandaste. Vi los clips y me encantaron.

Saludos desde Londres.

Ivis dijo...

¡Hola Cuban! Un placer saludarte por aquí. La verdad es que en estos tiempos de prisas olvidamos muy rápidamente, y lo que un día fue imprescindible (leer un blog tras otro, comunicarse con el mundo exterior)hoy es algo para lo que no queda mucho tiempo, espero que un día no muy lejano pueda volver a leer y escribir con asiduidad. Un saludo para tí y gracias por pasarte.

Anónimo dijo...

¿que pasa querida amiga que te sientas caotica y perdida?
¿estas sufriendo mal de amores, o la nostalgia de la isla te devora?
¿no te acabas de adaptar a la "realidad española?
entonces . ¿que dejas para esos presos cubanos que acaban de llegar y solo se quejan y no se san cuenta que tienen aqui que ponerse a trabajar y buscarse los frijoles?
Juan antonio

Adriana dijo...

bueno, yo peces de colores pa tí no tengo. pero encontré este video de unas mulaticas con hebillitas de colores que me ha levantáo de una maneraaaa....

ahí va:
http://www.youtube.com/watch?v=Gs6mVSpFd3E