viernes, 20 de marzo de 2009

Lady marmalade

Vivir dentro del bote de la mermelada no es posible, el oxígeno se agota y tanto azúcar acaba por fermentarse en el ácido más potente. Yo lo intenté; durante un tiempo me bastó con admirar el rojo interminable de las fresas, con aspirar su aroma dulce hasta saciarme de su perfume. Un mundo de mermelada, y yo en el centro, como una balsa flotando en medio de una piscina en una revista de viajes: segura y colorida estampa de lo que debería ser una vida, la vida que usted, lector amigo, se merece. ¿Y por qué no intentarlo? Eso mismitico pensé yo.
Ah, qué tiempos aquellos... cuando la vida era un eterno picnic y yo era la turista, mezcla de caperucita roja (por la cestita llena de regalos) con Hansel y Grettel, entrándole a la casa de chocolate que era mi vida por cualquier parte, si total, por todas estaba rica, por todas era nueva, por todas era yo. Ah, pero a quién se le ocurre ir así por la vida gastando los cartuchos de repuesto, cambiando el rumbo caprichosamente, ahora por aquí, luego por allá, haciendo honor a mi educación improvisada, a mi aprendizaje a trompicones.
Y así como una gota colma el vaso, yo me las agencié para echar a perder la mermelada. Que hasta de la dulzura uno se cansa, y yo ya estaba harta de ir todo el tiempo envuelta en miel y teniendo que lidiar con los golosos y otros gérmenes anaerobios. Y entonces dije no. Me tiré un pedo rotundo (y por supuesto se acabó la mermelada).

13 comentarios:

jecuevas dijo...

Yo creo que lo mejor en esta vida es cambiar de lo salado a lo agridulce, sin quedarse demasiado en ninguno. Y cuando vengan mal dadas decir como Celia: ¡Azuuúcar!

Queseto dijo...

Cara mía, cuando se "nace" en un bote de mermelada, por muchos "peos" que te tires, el sabor dulce SIEMPRE queda.

Cosa linda.

Ivis dijo...

Jajaja, qué cómica, amiga.
Jorge, así mismo estoy diciendo yo por estos días, ¡¡Azúcar!! y de paso me quito de arriba todos los malos rollos.
Un saludo, gente linda.

Anónimo dijo...

Ivis que buena eres escribiendo!!!de "un plumazo"(nunca mejor dicho)has salvado este mes de marzo que tanto me agobiaba.
Interpretaciones: todas la imaginable y todas seguramente acertadas,y tu humor es del tipo que nos despoja de los complejos y literalmente "nos cagamos de la risa seriamente pensando"
Gracias por tanto talento compratido: "Lady Mermelada"
un saludo:ROBERTO

Anónimo dijo...

Lady, Lady, quieras o no eres dulce, y atraes como la miel, y estás hecha de toda la hechicería cubana, con mucho del mundanal cosmopilitismo. Te admiro mucho y extrañaba tus textos, pues te dedicas mucho a colgar cosas en los últimos tiempos

Ivis dijo...

Roberto: Gracias de nuevo. Menos mal, ya me sentía un poco culpable por no cumplir tus expectativas. Un saludo, guapo.

Ivis dijo...

Anónimo, gracias por esos piropos que me han sonrojado. Un saludo desde el Mediterráneo.

Anónimo dijo...

Pero bueno, me pierdo un rato y esto se pone mejor cada dia, que bien que maduras mi China y linda como nunca. asi que vientos acaramelados?, jajaja esto si que es nuevo de verdad.
Un beso y muchas cosas buenas
Yo

Anónimo dijo...

ay, parece que neceitamos halar...jejejejej
un beso
Zuza

Ivis dijo...

Chinooooooooooooo!!!!!! Apareciste!
Qué rico chico, tú sabes que las puertas de mi blog siempre están abiertas pa tí.
Y gracias por lo de linda.

Anónimo dijo...

Si Amor de mis ojos, por aquí ando o desando, que crees los locos también sufren de crisis existencial. Me aleje de todo lo que oliera a Caribe, mulata y ron, confieso que me hirieron los coterráneos, el maldecir de algunos me enfermo de solemnidad y preferí tragarme mi orgullo que manchar las paginas de tu diario. Pero hoy resurjo como fénix recién emplumado, mariconeria aparte claro, con el ánimo redoblado y muy malas intenciones es decir vengo a por ti y a incordiar al vecino. En otras palabras volví.
Yo

Ivis dijo...

Cuántas cosas lindas, chino, has vuelto inspirado y me haces muy feliz con tu presencia. A ver si algún día das la cara ;-)

Unknown dijo...

La cita con el destino es ineludible,el camino se hace caminando, escribe que es lo tuyo, y confia en ti que es lo que te salvará del vertigo de pensar que no se sabe.
Un saludito en pleno vuelo.