Todo eso está muy bien, haber vivido mejor, peor, haber sentido... sin embargo tiene pecado detenerse demasiado a mirar hacia atrás y no darse cuenta de lo que sucede a tu alrededor. A mí me ha pasado.
Recuerdo una frase que leí una vez y que decía algo así como: "quien vive recordando glorias pasadas desanda el presente y fracasa en el futuro", y uno no quiere eso para sí, ¿verdad? El fracaso es una palabra fea, como el coco, y a veces esta más cerca de lo que uno se imagina, disfrazado de premio mayor.
Siempre que me secuestran esos demonios que me llevan a sentirme reina del carnaval por una noche, "la bárbara del ritmo", hay un día después, y en ese día sólo me tengo a mí y a mi realidad cotidiana, compuesta de la gente que me quiere y me acepta como soy, con mis defectos, y a la que no le importa si escribo o empino papalotes, porque básicamente no tienen tiempo de leerme, o no están para eso (que en este mundo hay tanto que hacer y todos los caminos conducen a Roma). Y entonces la ciudadana que soy se avergüenza de la bohemia que quise ser, porque seamos sinceros: ser bohemia no aporta mucho a la sociedad, es un gusto estético y nada más, pero no tiene el mismo mérito que levantarse día tras día a las siete de la mañana a currar. O al menos así se ve desde fuera, y el modo más fácil de darse cuenta es saber si te puedes pagar las facturas o no, de lo contrario tiene delito.
¡Ah, las facturas, toda una cuestión existencial! Y lo que hay que hacer para pagarlas a veces ronda la ciencia ficción, o la ilegalidad. Cada vez que pienso en los chupamedias que se arriman al poder, en la gente que ayer te ignoraba y hoy te sonríe descaradamente porque necesita de tí o porque de pronto te volviste importante, en los que se fijan en cómo vas vestido para saludarte o no... cada vez que pienso en ese tipo de cosas me pongo de los nervios. Curiosamente el mundo prefiere a los que pagan las facturas, da igual de dónde saquen el dinero, o si no es suyo, como los bancos, que dieron tanto cheque sin fondo a pobre gente que no tenía ni idea, ¡ah pero eran señores de traje y corbata, muy correctitos ellos, que se levantaban a las siete de la mañana a trabajar!
Sea como fuere hay que pagarlas (las putas facturas) y el que no lo ha asimilado es porque todavía está pensando en clave comunista, y el que se detiene mucho, como yo, a mirarse a sí mismo y a pensar en las musarañas, se encuentra con que un día no tiene lo que se necesita para vivir en paz consigo mismo y con los demás. Y es triste mirar hacia al lado y darte cuenta de que con tu insensibilidad y tu hedonismo estás afectando al prójimo. Y eso tiene delito, da igual como se pinte.
3 comentarios:
Mi querida Ivis: el arte es lo único que puede ayudarte a sobrevivir en este descarnado mundo capitalista (el otro también).Sigue bohemia, no te avergüences, que tu blog oxigena.Alicia
Sai Ivis, in Germania si dice: "Balsam für die Seele". In italiano la traduzione sarebbe come dire "balsamo per l'anima". Questa é la sensazione che si ha leggendo i tuoi post. Come dissi a mio figlio quando mi chiese chi eri vedendo il tuo blog sul mio computer: Questa é Ivis, solo per quello che scrive, vale giá imparare la lingua spagnola!
Sentimenti espressi di una purezza naturale in questo mondo che vuol reputarsi per i giusto, che peró é solo, come giustamente scrive Alicia Soria, un mondo capitalista dove regna solo denare, e quindi come "danno collaterale" il cosi amato potere (degli ipocriti ovviamente).
A volte purtroppo, bisogna fare sorrisi sforzati nel cattivo gioco. Cosa che a me sinceramente viene molto difficile, e da quel che leggo dalle tue parole, anche a te!
Siamo purtroppo in un sistema totalitario, mimizzato da nazioni (l'europa) liberi. Ma solo nell'apparenza purtroppo. Perché nonostante ci si reputano posti liberi dove viviamo, ci rendono in modo viscido schiavi del sistema nel quale giorno per giorno dobbiamo riuscire a sopravvivere.
Possiamo quindi davvero considerarci liberi? e nello stesso tempo giocare il gioco dei sorrisi, nascondendo le nostre preoccupazioni?
Ah giá, la crisi. Quella che tutti proclamano che sia colpa di essa. Ma a volte a me sembra una crisi artificiali fatta da chi vuole solo tenerci sotto controllo. ho questa sensazione a volte. Chi ne paga le conseguenze, alla fine siamo noi.
Un post bellissimo Ivis, come sempre!
Un abbraccio siciliano,
Salva :)
Alicia: Muchísimas gracias, querida, por este aliento que me llega en un muy buen momento. Un saludo.
Salva, qué decirte, amigo, eres tan gentil... lo que me has dicho me deja sin palabras. Es el piropo más bonito que me han dicho en toda mi vida. Muchas gracias, de corazón. Un abrazo.
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