domingo, 30 de septiembre de 2007

Jorge Luis Borges

Encontré este, se lo dedico al frigi

3 comentarios:

General Electric dijo...

qué bello soneto "Ajedrez"... Gracias por dedicármelo... Ya conoces lo que me gusta...Tiene una segunda parte que te voy a pegar aquí. Fíjate en la adjetivación tan magistral de la primera cuarteta... y el final es de muy altos quilates:

Tenue rey, sesgo alfil, encarnizada
reina, torre directa y peón ladino
sobre lo negro y blanco del camino
buscan y libran su batalla armada.

No saben que la mano señalada
del jugador gobierna su destino,
no saben que un rigor adamantino
sujeta su albedrío y su jornada.

También el jugador es prisionero
(la sentencia es de Omar) de otro tablero
de negras noches y de blancos días.

Dios mueve al jugador, y éste, la pieza.
¿Qué Dios detrás de Dios la trama empieza
de polvo y tiempo y sueño y agonías?

General Electric dijo...

por supuesto que ese último verso recicla al menos otros dos del Siglo de Oro, que Borges conocía de forma obligada: el gongorino "En tierra, en humo, en polvo, en sombra, en nada." y el sorjuanino "es cadáver, es polvo, es sombra, es nada."

Ivis dijo...

Pues ya echaba yo en falta algo, sobre todo esa última estrofa, pero pensé también que me había equivocado y que quizás Borges había escrito varios poemas sobre el Ajedrez. Me gusta sobre todo esa pregunta filosófica de "¿qué Dios detrás de Dios la trama empieza?".
Gracias, frigi.