Cuando llegué a España me llamó la atención el que los hombres no dijesen piropos como en Cuba, bueno, no es tan así, pero se cortan mucho porque aquí las mujeres se han rebelado y por cualquier cosa les ponen una demanda. A este especimen le ponía yo tres (demandas). Contiene lenguaje de adultos.
2 comentarios:
Ja ja ja!! Cosas parecidas veo yo todos los días en la obra (trabajo en la construcción).
Y dices que en España no se dicen pirópos? Qué le pregunten a la España profunda si no... Ja ja ja!!
Por cierto, tu comentario me recordó a un pasaje de la novela que leí recientemente, Muerte de un murciano en La Habana. Te cuento:
Dos cubanos van a buscar a un español al aeropuerto José Martí y mientras tanto...
"Una extranjera alta con un short cortísimo pasó junto a ellos. Iván Claro silvó admirativo y se quedó mirándola. La mujer le soltó una barbaridad en su idioma."
"-Cuidado, mi hermano -le advirtió Trinquete con aire de cosmopolita-. ¿Tú no sabes que eso allá afuera se llama acoso sexual y es un delito?
Veo que eres un gran aficionado a Cuba, qué bien.
El problema, creo, es que yo vivo en Mallorca y el carácter de los mallorquines, que me perdonen si me equivoco, no es igual que el del resto de los españoles, son diferentes, más secos, más introvertidos. Es un pueblo que siente igual, pero lo vive todo muy de puertas hacia adentro, son curiosos los mallorquines, y no lo digo yo, lo dicen ellos mismos. Un saludo, guapo.
Publicar un comentario